Un niño de 11 años fue el único que la vio: una luz intensa, roja, que se movía en zigzag se deslizaba veloz por el cielo. Finalmente apareció ante sus ojos un “aparato redondo y con ventanas”. Pensó que era la luz mala y se lo dijo a su abuela. Esa noche, ninguno de los dos pegó un ojo. Al otro día, 9 de enero de 1986, la Sierra del Pajarillo –el lugar por el que había aparecido el resplandor- amaneció quemada. Sobre la ladera había una mancha ocre y seca, de 122 metros de largo y 65 de ancho. No hubo dudas: por ahí había pasado un ovni.
Hasta esa fecha, Capilla del Monte era un poblado sin pena ni gloria, ubicado a 100 km. de la ciudad de Córdoba. Luego de este hecho, el lugar se dedica a explotar la mística de su cerro más importante: el Uritorco y cuenta con la oferta de servicios esotéricos más amplia de Latinoamérica además de haberse convertido en un importante centro ufológico. Lectura del aura, parques temáticos, turismo ufológico, mucho merchandising, un Centro de Investigación Ovni, programas de radio sobre el tema, congresos internacionales y locales decorados con platos voladores y muñecos de extraterrestres.
“Este pueblo cambió con la huella del Pajarillo. En el ´86, al cerro lo visitaban 400 personas por año, y hoy lo visitan 100 mil. Además, muchísima gente vino a vivir acá atraída por el fenómeno”, dice Jorge Suárez, director del Centro de Informes Ovni (CIO), conductor del programa radial Alternativa Extraterrestre, y organizador de quince congresos internacionales sobre el tema en Capilla.
En 1976 se desempeñaba como director de Turismo en la región cuando apareció el supuesto ovni. Él fue el encargado de recibir a los cientos de investigadores que empezaron a llegar de todo el mundo para analizar esa mancha en el cerro. Suárez, que nunca había creído en los ovnis, empezó a creer. Ahora organiza charlas en el living de su casa –centro de operaciones del CIO- de espaldas a un afiche que dice: “¿Estás preparado para la verdad?”
Los comechingones, antiguos pobladores de la zona, consideraban a Capilla del Monte como un lugar sagrado, ellos creían que las luces del cielo eran los espíritus de sus ancestros.
Según Fabio Zerpa, la relación entre los ovnis y el Uritorco puede relacionarse de tres formas: en primer lugar dice que en Córdoba existe un “Triángulo de Fuerza”, y que una de sus puntas es el Cerro Uritorco. En segundo lugar, asegura que – en tiempos del Pajarillo- los perros y los pájaros no ingresaban al círculo de tierra quemada, que eso era señal que a ese suelo había bajado un cuerpo extraño. Y por último, Zerpa está convencido de que bajo Capilla del Monte existe una ciudad extraterrestre llamada Erks adonde sólo se llega mediante “una precisa evolución espiritual y mental”.
Roque Seminara es habitante del lugar y asegura haber estado varias veces en Erks: “¿Sabés qué es ser esotérico? Es tener una capacidad consciente para comunicarte con tu espíritu. No es brujería: es meditación. A través de la meditación me comunico con ellos. Estuve cuatro veces en Erks. Fui con viajes astrales, y sé cómo son. Son bastante más grandes que nosotros, y viven en casas transparentes porque no hay nada que ocultar. No hay líderes, no hay gobiernos, no hay dinero. Cuando los vi, me di cuenta de que estos seres no van a permitir que le hagamos daño a la galaxia”.
La supuesta puerta de entrada a Erks queda en Los Terrones. Está simbolizada por una estructura de metal unida en su parte superior por un alambre del que cuelga un pedazo de cuarzo. Hasta allí llegan los llamados tours energéticos, Roxy Tassone, coordina uno de ellos. Cerca de esa puerta simbólica hay una treintena de personas sentadas en el piso, con las piernas cruzadas y los ojos cerrados. Roxy pide a los asistentes que repitan todo lo que ella diga:
- Invoco a las legiones de ángeles en rayos del arco iris- grita.
- Invoco a las legiones de ángeles en rayos del arco iris- repiten todos.
- Invoco a Lord Arthurus, a Balthazar y a Mahatma- continúa Roxy.
- Invoco a Lord Arthurus, a Balthazar y a Mahatma- repiten todos nuevamente.
Siguen las invocaciones a seres como “el doctor Lordman”, “el maestro Angepur”, “los ángeles del primer rayo”, “los catorce poderosos Eloims”, “Mentisedes”, “Metatrón”, etc.
-¡Viva Lord Arthurus y todos los arturianos!
¡Viva el comandante Ashtar y el comando Ashtar y las naves nodrizas!
Así finaliza Roxy sus invocaciones mientras alza una mano al cielo. Todos responden:
- ¡Viva!
“Este pueblo cambió con la huella del Pajarillo. En el ´86, al cerro lo visitaban 400 personas por año, y hoy lo visitan 100 mil. Además, muchísima gente vino a vivir acá atraída por el fenómeno”, dice Jorge Suárez, director del Centro de Informes Ovni (CIO), conductor del programa radial Alternativa Extraterrestre, y organizador de quince congresos internacionales sobre el tema en Capilla.
En 1976 se desempeñaba como director de Turismo en la región cuando apareció el supuesto ovni. Él fue el encargado de recibir a los cientos de investigadores que empezaron a llegar de todo el mundo para analizar esa mancha en el cerro. Suárez, que nunca había creído en los ovnis, empezó a creer. Ahora organiza charlas en el living de su casa –centro de operaciones del CIO- de espaldas a un afiche que dice: “¿Estás preparado para la verdad?”
Los comechingones, antiguos pobladores de la zona, consideraban a Capilla del Monte como un lugar sagrado, ellos creían que las luces del cielo eran los espíritus de sus ancestros.
Según Fabio Zerpa, la relación entre los ovnis y el Uritorco puede relacionarse de tres formas: en primer lugar dice que en Córdoba existe un “Triángulo de Fuerza”, y que una de sus puntas es el Cerro Uritorco. En segundo lugar, asegura que – en tiempos del Pajarillo- los perros y los pájaros no ingresaban al círculo de tierra quemada, que eso era señal que a ese suelo había bajado un cuerpo extraño. Y por último, Zerpa está convencido de que bajo Capilla del Monte existe una ciudad extraterrestre llamada Erks adonde sólo se llega mediante “una precisa evolución espiritual y mental”.
Roque Seminara es habitante del lugar y asegura haber estado varias veces en Erks: “¿Sabés qué es ser esotérico? Es tener una capacidad consciente para comunicarte con tu espíritu. No es brujería: es meditación. A través de la meditación me comunico con ellos. Estuve cuatro veces en Erks. Fui con viajes astrales, y sé cómo son. Son bastante más grandes que nosotros, y viven en casas transparentes porque no hay nada que ocultar. No hay líderes, no hay gobiernos, no hay dinero. Cuando los vi, me di cuenta de que estos seres no van a permitir que le hagamos daño a la galaxia”.
La supuesta puerta de entrada a Erks queda en Los Terrones. Está simbolizada por una estructura de metal unida en su parte superior por un alambre del que cuelga un pedazo de cuarzo. Hasta allí llegan los llamados tours energéticos, Roxy Tassone, coordina uno de ellos. Cerca de esa puerta simbólica hay una treintena de personas sentadas en el piso, con las piernas cruzadas y los ojos cerrados. Roxy pide a los asistentes que repitan todo lo que ella diga:
- Invoco a las legiones de ángeles en rayos del arco iris- grita.
- Invoco a las legiones de ángeles en rayos del arco iris- repiten todos.
- Invoco a Lord Arthurus, a Balthazar y a Mahatma- continúa Roxy.
- Invoco a Lord Arthurus, a Balthazar y a Mahatma- repiten todos nuevamente.
Siguen las invocaciones a seres como “el doctor Lordman”, “el maestro Angepur”, “los ángeles del primer rayo”, “los catorce poderosos Eloims”, “Mentisedes”, “Metatrón”, etc.
-¡Viva Lord Arthurus y todos los arturianos!
¡Viva el comandante Ashtar y el comando Ashtar y las naves nodrizas!
Así finaliza Roxy sus invocaciones mientras alza una mano al cielo. Todos responden:
- ¡Viva!
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