Nadie mejor que Obama para encabezar cambios drásticos (última parte)

Tiene a Acuario por signo ascendente, lo que le convierte en una persona de pensamiento avanzado, un reformador abierto hacia el futuro y con una nueva visión de las cosas. Es un hombre de elevados ideales y sinceras tendencias filantrópicas, intuitivo e inspirado. Está dotado de talento creador.

De cara al exterior es una persona sociable, cortés, comunicativa, simpática y con una gran capacidad para escuchar a todos, pero ello no resta firmeza a sus principios. Esta tendencia aparece reforzada por una influencia poderosa de Urano, que se encuentra angular, muy cercano al Sol y conjunto al Nodo Norte de la Luna, lo que hace que su vida esté llena de cambios e imprevistos y lo convierte en la persona ideal para pilotar su país en un período tempestuoso, lleno de crisis y transformaciones de todo tipo, que podría constituir el final de un ciclo histórico y el comienzo de otro. Obama puede incluso anticiparse al futuro, ya que él es el futuro.
Barack Obama tiene en su carta natal un relevante y poco frecuente aspecto: una conjunción Júpiter-Saturno que lo convierte en una persona notable. Además, Júpiter se encuentra en el signo de Acuario, lo que potencia aún más la influencia de este signo sobre su personalidad y sobre su destino. La conjunción de los dos planetas gigantes es un aspecto presente en el nacimiento de muchas grandes celebridades pertenecientes a los ámbitos espiritual e intelectual. Pero, además, esta conjunción le ayuda a conjugar idealismo y sentido práctico, lo que le predispone a alcanzar el éxito y a materializar sus sueños. Es muy probable que pase a la historia como un presidente muy notable. De entre los grandes y más famosos mandatarios estadounidenses solo encontramos una conjunción similar en Franklin Delano Roosevelt, un presidente con el que muchosle han relacionado, ya que al igual que Obama tuvo que tomar el mando del país en un momento de gravísima crisis económica, tras el terrible crack de 1929.
El nuevo presidente de EE.UU. ha sido elegido bajo el claro signo del cambio y la renovación. En la carta astral de las elecciones del pasado 4 de noviembre, Saturno se opone a Urano, lo que simboliza el choque entre los valores conservadores y progresistas y la llegada de una nueva época. Hay claros indicios de que su mandato será un éxito. El Sol y Marte forman sendos trígonos con Urano, lo que indica que pondrá en marcha profundas reformas que serán muy acertadas. Más importante aún es el gran trígono entre los gigantes Júpiter y Saturno, ambos en signos de Tierra, que apunta que Obama adoptará importantes iniciativas relacionadas con la economía –su preocupación prioritaria – que tendrán excelentes resultados. Asimismo, esto muestra que su modo de actuar estará marcado por el realismo y el sentido práctico. Finalmente, hay que señalar que con una conjunción del Sol y Marte en Escorpio no estamos ante un presidente débil ni pacifista. A Obama no le temblará el pulso si se ve obligado a enfrentarse a una crisis o incluso a utilizar la fuerza.